Los blindajes para protección radiológica son barreras físicas diseñadas para reducir la exposición a la radiación ionizante. Están fabricados con materiales como plomo, hormigón o acero, seleccionados según el tipo y la energía de la radiación. Su eficacia depende del grosor y diseño, y se utilizan en entornos como salas de radiología, laboratorios y plantas nucleares. Los blindajes son esenciales para proteger a los trabajadores, pacientes y el medio ambiente de los efectos nocivos de la radiación.